martes

Yo , Mimi y Lemebel

Yo, nunca me contagie de la gonorrea que tanto temía el padre de un amigo que se contagiara el, a veces pensé que tanto al gonorrea del padre de mi amigo, como la posible gonorrea de mi amigo, incluía un mensaje de alerta para mi. A mi, mi padre solo me dijo: "traes recuerdos”, y si lo vemos de otro punto de vista una gonorrea es un recuerdo, no lindo, pero carajo recuerdo al final. Mimi, que es diminutivo de Miriam, que bien puede ser Mimita, o cuanto quisiera yo fuera Miita, sonríe, con esa risa refleja el sol en cara carcajada, ilumina como farol el mundo oscuro que existe entre mi y alguien mas, que no es mimita. A mimita le comencé ha hablar sin querer hablarme, incluso sus castaños cabellos que tercamente se rizaban siempre me causaban gracia, pero nunca, de lo nucas se lo dije. Exactamente , no se la verdad como comencé a hablarme , claro no es una cosa que digan Mi buen como se hablan estos dos tipos , pero por lo menos movía la mano y le decía " Hola" , ella diligentemente respondía con otro hola igual de rápido. En arte de creación II, en la escuela de literatura de Madrid, coinsidimos - como nunca - en la dichosa clase. Y fue el destino , el destino al que le hecho la culpa toda la vida de mi destino , que tanto en el grupo de ella como en el mió alguien haya huido de las clases de arte de creación II, aquel día nos juntamos.. En clase de Historia del Lenguaje , leía a Lemebel , Mimi vino con su acostumbrada sonrisa , acostumbrada para sus amigos íntimos , casi extraña para sus amigos no íntimos , pongámoslo como para sus conocidos que aspiran a ser sus amigos , yo como entenderán soy un conocido suyo. Seguía con Lemebel en la mano, era fácil leer libros de el sin que te miren mal, igual en Madrid nadie sabe que Lemebel es la mas cabrilla de todos los chilenos, y las mas talentosa, Roberto Bolaño - no el chavo sino el escritor - en su tiempo dijo, Lemebel es el mejor poeta de mis tiempos. Si tomamos en cuenta que para Roberto Bolaño su tiempo es universal, Lemebel es universal, Mimi no sabía tampoco que lemebel existía, pero más sorpresa le causo que yo leyera literatura, raro, pero estudiando ambos literatura, era difícil no leerla. En historia del lenguaje me senté atrás, como en todas las clases, las detesto, pero esta es la que mas detesto, me sobreviene esas ganas de arrastarme y que no me vea, el que dicta el curso siempre se para en la puerta, yo lo saludo, pero igual el huevon nunca me responde, dice que a veces me porto bien y otras mal. A me gusta portarme mal siempre. Cogía mi silencio y lo guarda para mi, como se pueden guardar los silencios, con mucho ruido y pompa magistral, baje la mirada y Mimi que a mí lado se sentó me siguió hablando de sus autores, yo no conocía ninguno, es que a mi me gusta la Generación X y Literatura Latinoamericana, soy un vulgar lector que lee, premio Planeta y compra el libro, para ver que es lo que califican los jurados, jurados que muy pocas veces se quienes son. Mientras mimi hablaba , el indeseable , patrañoso , especialista de Historia del lenguaje , nos junto , nos volvió pareja , esa parejita de atrás vengase para adelante , por unos cuantos segundos mientras mimi y yo nos levantábamos de nuestros asientos , fuimos la parejita chacotera , los habladorcillos , la chica súper druper inteligente y el muchacho vagoneta que todos saben cual será su destino , una sucia calle de Madrid donde pueda pedir limosna . Fueron pocos esos segundos donde mimi y yo fuimos pareja por obra y gracia del indeseable docente de aquel curso, que cabe destacar era de lo más aburrido. Fuiste mía mimita, esos pocos segunditos, mía en mi cabezota, tuyo en mi cabezota. Eres mi ex imaginaria con la que fui pareja por pocos segundos mimita de rizos gracioso de luminaria sonrisa. Todo eso paso por mí, por ti y por Lemebel y claro tus autores que no me gustan

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